La demanda de seguros contra riesgos políticos aumentó un 33% el año pasado, una subida motivada por que los clientes globales buscaron protección ante la creciente tensión geopolítica, la incertidumbre macroeconómica y la interrupción de la cadena de suministro. Así lo indica un nuevo informe publicado por Howden, titulado “Opportunity in Flux”, que ha revelado que el mercado total de seguros de caución, crédito y riesgos políticos (CPRI) alcanzó la considerable cifra de 50.000 millones de dólares en primas.

Esto indica que este tipo de seguros ha pasado a ser común y es una herramienta más que ayuda a asegurar operaciones internacionales, reducir el impacto de conflictos políticos y bélicos y hacer más probable el acceso a financiación en contextos inestables. El entorno geopolìtico internacional es muy inestable con guerras en diversas zonas del mundo como, por ejemplo, Oriente Medio y Ucrania, y con decisiones políticas trascendentes como las nuevas barreras arancelarias impulsadas por Estados Unidos. Todo ello ha provocado efectos profundos en muchos países del mundo, en especial un encarecimiento de las importaciones que ha afectado a una gran parte de las empresas.

En este contexto, el seguro de riesgo político se convierte en un instrumento muy valioso porque da tranquilidad y protección a las empresas y les facilita invertir con mayores garantías en el exterior.