Los mediadores son los expertos que asesoran sobre las coberturas que debe incluir tu póliza de Hogar

Tres de cada cuatro incendios que se producen al año tienen como escenario las viviendas. El seguro de Hogar incluye las coberturas para atender los daños que ocasione el fuego, pero también nos proporciona consejos para tratar de prevenir los incendios. Tu mediador de seguros te asesorará para garantizar que tu póliza contempla todas las garantías que precisas en caso de que las llamas causen daños en tu vivienda.
El seguro es una vía de protección frente a los destrozos que pueden ocasionar un incendio. Las cifras oficiales señalan que el sector paga al año 500 millones de euros para indemnizar por los daños causados por incendios en inmuebles que están asegurados.
La indemnización media en caso de incendio es de 2.683 euros por vivienda. Una cifra que es muy superior en el caso de los comercios (5.406 euros) y, especialmente, de las industrias (50.586 euros), según datos de UNESPA, la patronal que agrupa a las aseguradoras que operan en el mercado español.
La mayor parte de los inmuebles con coberturas frente al fuego se encuentran en las provincias con más población: Madrid, Barcelona, Valencia, Sevilla, Alicante… Pero el dato curioso es que las provincias en las que es más probable que se produzca un incendio son, por este orden, Lugo, Badajoz, Córdoba, Jaén y Cuenca. En general, las localidades con menos de 50.000 habitantes son más propensas a sufrir incendios.
¿Qué hay que hacer en caso de incendio?
– Llamar al 112 y avisar a los vecinos.
– En caso de humo, cerrar las puertas para evitar que se propague y desplazarse agachado.
– Si hay humo en la escalera hay que permanecer en el domicilio y alertar a los servicios de emergencia a través del 112 o realizando señales a través de ventanas o balcones.
– Una vez en lugar seguro, se recomienda esperar a los bomberos para facilitarles información.
¿Qué medidas de prevención son más eficaces?
– Instalar detectores de humo, especialmente, si residen personas especialmente vulnerables como niños, ancianos y personas con movilidad reducida.
– Es aconsejable tener un extintor, una manta ignífuga o una red de rociadores automáticos en el hogar para evitar que el fuego se propague.
– Los muebles, suelos o telas, han que tener unas características de ignifugación para evitar o retrasar la propagación de las llamas
Consulta con tu mediador de seguros para conocer las coberturas que no pueden faltar en tu póliza de hogar.