Las reglas de York y Amberes son consideradas las normas más importantes en relación con la regulación de las averías marítimas y se encuentran en la mayoría de los apartados de cláusulas de las pólizas de seguros de mercancías.

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El armador del buque Dalí declaró el pasado día 26 de marzo AVERÍA GRUESA por el incidente que derrumbó el puente de Baltimore. El portacontenedores Dalí, perteneciente al Registro de Buques de Singapur y cuyo armador es Grace Ocean Private Ltd y su operador, Sinergy Marine Group, experimentó un fallo eléctrico mientras navegaba desde Baltimore hacia Colombo Berlanga el 26 de marzo de 2024. Aunque la tripulación alertó rápidamente a las autoridades y logró recuperar brevemente el control, un segundo fallo derivó en la colisión contra el puente Francis Scott Key en Baltimore. 

La decisión de declarar avería gruesa puede basarse en diversos factores como la entidad de los daños sufridos por la embarcación y la carga, como por las implicaciones financieras tanto para el armador como para los cargadores involucrados. La avería gruesa tiene como objetivo principal compartir los costos de los sacrificios extraordinarios realizados para salvaguardar una expedición marítima. Esto implica que todas las partes involucradas contribuyan al coste de los sacrificios realizados en beneficio común. La avería gruesa está regulada en las Reglas de York y Amberes. 

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