La diversidad y la inclusión se han convertido en valores de referencia en la gestión empresarial, entre otras razones, en cumplimiento de los ODS de la agenda 2030 de las Naciones Unidas. Estos conceptos incluyen, en el ámbito laboral, a colectivos o minorías poco representados o con poca visibilidad en las empresas
Se considera que el modelo tradicional de la gestión empresarial no contempla la diversidad y la inclusión de colectivos y minorías para sus plantillas. Hoy la estrategia y el impulso promovido por las principales organizaciones globales como Naciones Unidas o la Organización Internacional del Trabajo plantean la diversidad corporativa como una respuesta a la exclusión laboral.
Mostrar que se es una compañía diversa e inclusiva es un valor corporativo de gran importancia. La diversidad corporativa hoy día necesita complementarse con estrategias de inclusión y fomento de la equidad no sólo en las empresas sino también en la sociedad.
Es clave eliminar prejuicios, estereotipos, indiferencia, desconocimiento y discriminación. Todo ello impide el desarrollo pleno e integral de todas las personas en la empresa. ¿Cómo lo se puede lograr? En el estudio de la consultora Michael Page de 2022 sobre diversidad e inclusión se destaca que convertir la diversidad y la inclusión en valores estratégicos incluye acciones como:
1.- Eliminar estructuras obsoletas.
2.- Mayor retención de talento.
3.- Mejor representación de la igualdad.
4.- Más presencia de la multiculturalidad.
5.- Promoción de la aceptación de la orientación sexual.
Y todo ello se ha comprobado que logra resultados tan positivos como:
- Mejor imagen externa y más atractivo de la compañía para los potenciales candidatos.
- Mayor satisfacción de los empleados.
- Entornos de trabajos positivos y estimulantes.
- Mayor cooperación entre equipos.
- Una relación más positiva con clientes y proveedores.
- Productos y soluciones más innovadores.
- Acceso a nuevos mercados y grupos de consumidores.
- Aumento de los ingresos.
